El
glitch primitivo es azar puro pero con trabajo y muchas horas
frente al monitor se puede aprender a controlar resultados.
Este
post se trata de encontrar un equilibrio entre azar y control.
Con la edición hexadecimal de archivos nacen nuevas formitas extrañas, como pequeños mutantes que alberga la imagen.
Se me ocurrió ir a lo micro y tomar esos pequeños detalles que tanto me gustan por la gran personalidad que tienen a pesar de su pequeño tamaño y darles el papel principal en lugar de que pasen desapercibidos en la totalidad de la imagen.
Es sorprendente que formas tan extrañas tengan su origen en un precursor tan diferente.
A su vez si clonamos estas formitas y las repetimos encajan tan perfectamente entre sí que causan efectos visuales lisérgicos con destellos de Op-Art.
Estas imágenes son entonces el resultado de un equilibrio entre el azar mediante el que nacen las nuevas formas y el control de seleccionarlas para hacer algo aún más nuevo.
Desde que experimento con el error en las imágenes digitales sentí que si editaba los resultados no estaba siendo fiel al concepto, que era como hacer trampa, pero creo que de esta manera (edición mínima copy/paste) estoy aprovechando más la belleza que proporcionan estos procesos de rotura.
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